Es intendente de General Roca, la segunda localidad más importante de la provincia de Río Negro desde hace dos períodos. Se anotó en la carrera por la Gobernación de la provincia de cara a las próximas elecciones, y lós números, por el momento, están de su lado. Enfrente tiene al senador Miguel Angel Pichetto, que parace haber perdido el apoyo incondicional K. Durante su gestión municipal la oposición ha denunciado varias irregularidades, entre las que se encuentran sobreprecios en la realización de obra pública, motivo por el cual se hicieron varios allanamientos y se abrió una causa penal. Además, el Jefe Comunal tiene nombrados en puestos claves de la Municipalidad a varios familiares directos y amigos. Tuvo un paso escandaloso por la provincia de Buenos Aires y por la secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) entre 1999 y 2002. Perfil de Carlos Soria, un hombre polémico que ha sabido cosechar buenas relaciones y que hoy se proyecta como el candidato del PJ a la Gobernación de Río Negro.

Trayectoria política

Carlos Ernesto Soria nació en 1949 en la ciudad de Bahía Blanca. Proviene de una familia de amplia trayectoria política dentro del peronismo. Su padre, Ernesto Soria, un activo militante del PJ bonaerense fue detenido tras el golpe militar del año 1955. Tras su liberación, la familia Soria decide mudarse a la provincia de Río Negro, precisamente a la localidad de Bariloche hasta que en 1962 se traslada a General Roca, donde abre un almacén de barrio. El actual intendente pasó parte de su infancia y toda su adolescencia en Roca. Terminó sus estudios secundarios en el Colegio Domingo Savio de esta localidad hasta que se muda a Buenos Aires donde cursó la carrera de Derecho. Soria se recibe de abogado en 1973.

Tras finalizar sus estudios decide volver a General Roca donde ejerció algunos años como abogado en la actividad privada y comenzó a meterse en política. Específicamente, en cargos partidarios dentro del peronismo. Fue así como se quedó primero con la Unidad Básica de General Roca, luego se convirtió en congresal del partido y también en consejero provincial y nacional. Más tarde fue electo, de la mano del PJ, Diputado nacional por la provincia de Río Negro, cargo en el que se mantuvo durante cuatro períodos consecutivos, hasta que en 1999 y tras no poder alcanzar un nuevo mandato, fue reclutado por Eduardo Duhalde.

Su trabajo en el ámbito legislativo estuvo ampliamente cuestionado. Fue presidente durante muchos años de la comisión de Asuntos Constitucionales, trabajó en las comisiones de Juicio político, de Justicia, fue presidente de la Comisión Bicameral que hizo el seguimiento a la investigación de los atentados a la embajada de Israel y al edificio de la AMIA. También fue miembro de la Comisión Especial que investigó el lavado de dinero en Argentina, motivo por el cual afrontó otra denuncia penal de la que finalmente salió sobreseído.

En el ocaso de esa gestión y luego de que el PJ rionegrino no avaló una nueva postulación para que sea diputado nacional, el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires, Eduardo Duhalde, lo captó para sus filas y le abrió las puertas que se le habían cerrado en el PJ rionegrino para obtener la reelección como diputado por la lista bonaerense, en el ‘99. Cargo en el que pidió licencia para pasar a integrar el Gabinete de Duhalde, en el ministerio de Justicia y Seguridad, tras la salida de Enrique Lorenzo por la escandalosa “Masacre de Ramallo”.

Estuvo al frente de esa cartera apenas unos meses . Luego de la caída de Fernando De la Rúa y con Eduardo Duhalde al frente de la Presidencia, fue designado ministro de Inteligencia (titular de la secretaría de Inteligencia del Estado), cargo al que renunció en el mes de julio de 2002 para lanzar su candidatura a Gobernador de la provincia de Río Negro. Aunque fue corto, en este período cosechó fuertes críticas no solo por el manejo discrecional del presupuesto del organismo, sino además por su participación en la denominada Masacre de Avellaneda, donde fueron asesinados los manifestantes Darío Santillán y Maximiliano Kosteki. En las elecciones a Gobernador por la provincia de Río Negro perdió contra el actual mandatario radical. Pero lejos de desilusionarse por los resultados, a los pocos días, Carlos Soria se presentó como candidato a intendente de la ciudad de General Roca, ganando la Intendencia por apenas 189 votos contra el candidato radical. En 2007, se vuelve a presentar como candidato a la Intendencia de General Roca, aunque esta vez gana por amplio margen. Durante su gestión como Intendente, en la que cosechó una buena imagen, fue denunciado en dos oportunidades.
En primer lugar en una causa en la que se investigan sobreprecios y desvío de fondos destinados a la obra pública. Motivo por el cual el municipio fue allanado a mediados de este año. Y, la segunda, por un entredicho verbal y supuesta agresión contra el actual ministro de Gobierno y por entonces concejal, Diego Larreguy. Por este caso se le inició una demanda penal. Carlos Soria ha gritado a los cuatro vientos que será candidato a Gobernador por el Partido Justicialista en las elecciones del año que viene.

Los sondeos que viene realizando el PJ en la provincia indican que Soria supera ampliamente en imagen a Pichetto. Por este motivo, Kirchner, envalentonado con la idea de recuperar la provincia, ha dejado de lado su prefencia inicial por Pichetto y hoy le pide al senador que sea capaz de adaptarse a la circunstancias. Esto abre la posibilidad de que finalmente Soria sea el candidato y Pichetto su vice, algo que hace unos meses atrás parecía totalmente imposible.

Todo queda en familia

El intendente de General Roca, Carlos Soria, no sólo se siente como en su hogar en el municipio que comanda porque hace casi 8 años que dirige los destinos de los roquenses, sino porque está rodeado de “su gente”: familiares y muchos “afectos” lo acompañan, incansables, en su gestión y en las principales oficinas municipales. Como una “gran familia”, sostienen allegados a la comuna. La mayoría por designación directa del Ejecutivo cumple importantes roles y llenan la planta política, los que conforman su círculo más estrecho.

Una de “sus manos derechas” es Julián Goinhex, públicamente aceptado como un “hijastro” del mandatario local, quien empezó su carrera en las filas soristas -en la primera gestión- como “vocero” de lujo, representante del área comunicacional de la Comuna, dueño de una “particular” forma de relacionarse con los medios. Pero desde los últimos años -ya en el segundo período- escaló posiciones, asumió mayores responsabilidades y, actualmente, se desempeña como director de Asuntos Administrativos y Coordinación Institucional. Un dato: nadie, o prácticamente nadie, puede “pasar” y llegar hasta el Intendente, ya embarcado de lleno en su proyecto 2011 con intenciones de quebrar más de dos décadas de hegemonía radical y llevar el Partido Justicialista al sillón de la Gobernación provincial.

Allí cerquita -incluso, físicamente, a pocos pasos del despacho municipal del titular del Ejecutivo-, el Intendente también aseguró un puesto de confianza, como lo es la dirección de Comunicación Institucional, a una persona “de confianza”: su nuera, Victoria Argañaraz. Una joven egresada de la Universidad Nacional de La Plata, casada con el hijo menor del Intendente, Carlos Soria. El más pequeño de los Soria se dedica a la publicidad y es el principal encargado de la ya lanzada campaña de cara a la Gobernación 2011. Pero además, para no estar lejos de sus afectos, Leila Aschkar, su otra nuera, esposa del actual legislador justicialista, Martín Soria, también cumple funciones en el municipio roquense. Aschkar es escribana y su puesto es el de directora de Asuntos Notariales del municipio.

Funcionarios en combo 2 x 1

En tanto, resulta llamativo, o por lo menos sorprende, el “2 x 1” implementado por la gestión Soria y aplicado en la integración de sus colaboradores más cercanos. Es que la mayoría de los funcionarios políticos de primera línea que dan forma integral a su Gabinete parecen ser parte de una promoción de hamburguesas, ya que tienen parientes nombrados en otros puestos. Veamos cada caso:

Pablo Bergonzi, un joven abogado, es el máximo representante de la Comuna en el área legal. Es el actual director de Asuntos Legales. Pero no está tan solo. A nivel familiar, claro. Su hermano Guido Bergonzi fue incorporado al municipio y designado como director de Arquitec-tura.

La secretaria de Desarrollo Social, Delia Gómez, acompaña al Intendente local desde su primera gestión, pese a las críticas desde diversos sectores que recibe su línea de acción. Su hermano, Alberto Gómez, cumple un rol importante en la comuna de General Roca, ya que también tiene una dirección a su cargo: la de Tránsito y Transporte municipal.

El secretario de Obras Públicas, el ingeniero César del Valle, lidera la Secretaría que maneja mayor presupuesto anual en comparación con las demás. Teniendo en cuenta que para 2011 se prevé una inversión de más de 27 millones de pesos, una cifra nada despreciable si se tiene en cuenta que el presupuesto municipal de recursos para el año entrante, según se proyecta, superará largamente los 100 millones de pesos. Del Valle, inmerso en tamaña tarea, tampoco está “solo” en lo que a parientes se refiere: su hija, Guadalupe del Valle, también ostenta un rol importante dentro de la Comuna: es la directora de Turismo.

En definitiva, un Gabinete más que familiar el del intendente Soria.